Importante es, tanto para la empresa como para sus colaboradores, que el proyecto de conciliación de la vida privada con el trabajo no desaparezca en tiempos difíciles.
Para asegurar esto se creará en la empresa la figura del “Embajador”. Esta será la persona que se encargará de que todos en la empresa conozcan las posibilidades que ésta ofrece a sus trabajadores para una conciliación excelente.